CONVERTIRSE EN CRISTIANO PUEDE HACER QUE SIENTAS QUE TODO TU MUNDO HA CAMBIADO. Y EN MUCHOS SENTIDOS, ¡LO HA HECHO!

Esto es emocionante y también puede dar miedo. Tienes toda una vida que has estado viviendo hasta este punto, y es posible que te preguntes cómo avanzar en las relaciones con tu familia y amigos que no conocen a Dios.

Es posible que te preguntes cosas como: “¿Qué les digo a mis amigos actuales o a mi familia sobre mi relación con Jesús?” o “¿Tengo que conseguir un grupo de amigos completamente nuevo?”

La buena noticia es que no, no tienes que necesariamente encontrar nuevos amigos. De hecho, tienes la libertad de invitarlos a esta nueva experiencia contigo.

HE AQUÍ UN EJEMPLO DE LAS ESCRITURAS:

En Mateo 9, después de que Jesús llama a Mateo (también llamado “Leví”), para ser uno de los doce discípulos, no van a un lugar de reunión “solo para discípulos”. En cambio, terminan de nuevo en la casa de Mateo con Jesús, pecadores y recaudadores de impuestos (presumiblemente amigos de Mateo). En otras palabras, Mateo no ocultó su fe a los que ya estaban en su vida. ¡Inmediatamente se lo dijo, pasó tiempo con ellos y celebró!

Los amigos de Mateo seguramente tenían preguntas, y tal vez escepticismo, sobre su nuevo propósito de seguir a este maestro poco conocido llamado Jesús. Del mismo modo, es posible que las personas en tu propia vida ya tengan ideas y opiniones sobre lo que significa conocer a Dios.

Te animamos a que des la bienvenida a estas conversaciones sabiendo que no tendrás todas las respuestas a sus preguntas, – ¡y eso está bien!

Concéntrate en el hecho de que solo puedes compartir desde tu propia experiencia y desde lo que has aprendido acerca de Jesucristo hasta ahora.

Si bien tienes total libertad para contarles a tus amigos y familiares acerca de convertirte en cristiano, también querrás conectarte con otros cristianos en la iglesia que puedan apoyarte en este nuevo viaje.

La belleza de la vida cristiana es que puedes amar y caminar junto a los no creyentes mientras vives en comunidad con los creyentes, ¡no tienes que elegir!

Hay un vínculo y una fuerza únicos que provienen de buscar la comunidad con otros creyentes porque Dios nos dio la iglesia para que podamos llevar las cargas de los demás, ayudarnos a ser más como Jesús y unirnos a Él en la Misión.

Hay varias maneras de hacer esto, como unirse a un grupo comunitario, la Experiencia Descubriendo a Jesús, o encontrar un lugar para comenzar a servir los fines de semana en la iglesia.

Convertirse en cristiano significa que su círculo de comunidad crece, no se reduce. Puedes contarles a tus amigos y familiares sobre tu fe con valentía y entusiasmo, y puedes entablar nuevas relaciones con los creyentes, todo al mismo tiempo.

Te animamos y estamos aquí para cualquier otra pregunta que puedas tener.